Libros del Zorro Rojo publicó en 2009 una elegante edición
de losCuentos de imaginación y misteriode Edgar Allan Poe en la traducción de
Julio Cortázar y con las sugerentes ilustraciones en blanco y negro de Harry
Clarke.
Este libro contiene relatos tan conocidos como "William
Wilson", uno de los textos habitualmente citados al hablar del tema del
doble; "El pozo y el péndulo", en el que presenciamos la angustia
insoportable de un hombre condenado por la Inquisición a las peores torturas;
"Manuscrito hallado en una botella", donde el protagonista nos cuenta
su terrorífica aventura en un barco fantasmagórico; "El gato negro",
que cuenta la transformación del narrador, llevado hacia el crimen por la
maléfica influencia de su mascota; o "La caída de la casa Usher", en
la que la atmósfera gótica de la mansión en que viven los hermanos Usher, la
enfermedad nerviosa que sufre Roderick y los extraños acontecimientos que se
suceden sumergen al lector en un relato del más puro terror.
Los personajes de estos textos se encuentran, a menudo,
entre la racionalidad y la locura, llegando a dudar de lo que ellos mismos nos
cuentan, como vemos al principio de "El gato negro":
No espero ni pido que alguien crea en el extraño aunque
simple relato que me dispongo a escribir. Loco estaría si lo esperara, cuando
mis sentidos rechazan su propia evidencia. Pero no estoy loco y sé muy bien que
esto no es un sueño. Mañana voy a morir y quisiera aliviar hoy mi alma. (Poe
2009: 73)
Además de estos cuentos y otros, que podríamos incluir en el
ámbito de la literatura fantástica, esta colección incluye dos de los tres
textos de Poe que se consideran como fundadores de la literatura policíaca:
"Los crímenes de la Rue Morgue", que ve nacer al detective Auguste
Dupin con un caso de los que se han dado en llamar de habitación cerrada; y
"El misterio de Marie Rogêt", donde, por segunda vez, vemos a Dupin
hacer gala de sus dotes deductivas ante el asesinato de una joven en París.
Estas habilidades nos las señala ya en el primer relato su amigo y narrador:
En esas oportunidades, no dejaba yo de reparar y admirar
(aunque dada su profunda idealidad cabía esperarlo) una peculiar aptitud
analítica de Dupin. Parecía complacerse especialmente en ejercitarla -ya que no
en exhibirla- y no vacilaba en confesar el placer que le producía. (Poe 2009:
298)
Para saber más sobre Poe, podéis consultar la web del museo
que le han dedicado en Richmond, Virginia. Allí encontraréis información sobre
el autor y sus obras, así como algunas recomendaciones de lecturas y links a
otras páginas interesantes.
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